Vino natural del año, de los llamados vinos tranquilos de la tierra de Cádiz. Compuesto por las variedades de Palomino y Moscatel.
Es uno vino distinto. Al cual se le ha detenido la fermentación por inducción de frío, a temperaturas muy bajas para alcanzar sus máximas cualidades.
A la vista, es de un color amarillo brillante, con tonos verdosos.
A la nariz, es muy afrutado y fresco, con toques de frutas tropicales como la piña.
Al paladar, es muy agradable, amable y armonioso, con buen equilibrio, dejando sensaciones frescas y dulces, al mismo tiempo. Persistente y sugerente que nos deja con ganas de beber más.
Para beber a temperaturas muy frescas, entre 4/9º C. En un lugar agradable y en buena compañía. Con la posibilidad de probarlo en TODO MOMENTO.
Botella borgoña, 75 cl, ecova de color canela.
Conservar en un lugar fresco, exento de humedad, con pocas vibraciones y poco ruido.